La isla de Fernando de Noronha, la mayor entre la veintena de islotes que forman el archipiélago homónimo en el océano Atlántico, al noreste de la costa brasileña, es actualmente promocionada con la campaña “Más Noronha”, que ofrece descuentos en servicios como alojamiento, excursiones y restaurantes.
“Más Noronha”, implementada por el gobierno de Pernambuco para incentivar los viajes al archipiélago Fernando de Noronha durante la temporada baja (de abril a junio), otorga descuentos del 10% al 30% en alojamiento, paseos en barco, alquiler de vehículos, buceo, líneas áreas, restaurante y otros servicios.
Además de precios reducidos, algunas bellezas de Noronha se han vuelto accesibles para personas con movilidad reducida. De acuerdo con EcoNoronha, concesionaria responsable de las obras de mejoría en el Parque Nacional Marinho, acaba de ser concluido el sendero suspendido con accesibilidad para discapacitados físicos que une el Mirante dos Golfinhos al Sancho. El recorrido total comprende 943 metros de extensión.
Todos los materiales utilizados para la obra son ecológicamente sostenibles, lo cual reduce drásticamente el impacto ambiental del desarrollo turístico en ese destino, Patrimonio natural de la Humanidad desde 2001.
Entre los materiales utilizados está la madera biosintética, desarrollada a partir de plástico reciclado. De esa manera, el parque es el primero de Brasil en utilizar en su totalidad ese tipo de material.
A 545 Km. de Recife, Fernando de Noronha es un archipiélago compuesto por 21 islas e islotes, que alberga playas de aguas de color esmeralda y una excelente estructura hotelera y gastronómica. Accesible por avión o barco, la distancia del continente ayuda en la preservación de la naturaleza y contribuye a un clima romántico y relajado. La principal isla funcionó como presidio durante 201 años y hasta 1987 era territorio militar.
A partir de los años 90, la región fue abierta al turismo pero con restricciones. Entre las medidas adoptadas está la que restringe la pernoctación a sólo 700 personas al mismo tiempo.
En 1988, el Instituto Brasileño de Medio Ambiente y de Recursos Renovables –IBAMA- transformó a la región en Parque Nacional Marinho (dos años antes la isla ya se había convertido en Área de Preservación Ambiental). En 2001, el archipiélago fue declarado por la Unesco como Patrimonio Mundial Natural y hoy es un santuario ecológico.
La preservación de distintas especies de animales es una constante en Noronha y se ha articulado con el turismo. Entre los innumerables paseos que combinan diversión y conciencia ecológica está la visita al Projeto Tamar, responsable de salvar a miles de tortugas marinas todos los años.
El Projeto Tamar permite que los turistas participen en el emocionante momento de la apertura de los nidos de las tortugas. Esta actividad, que tiene lugar entre los meses de marzo y junio en la Praia do Leão, consiste en acompañar la liberación de las pequeñas tortugas y observarlas moverse en dirección al mar. Generalmente se sueltan 50 animales por día, en un procedimiento abierto al público de forma gratuita.
Otra iniciativa que proporciona un mayor contacto con las tortugas verdes es la “tartarugada” (tortugada), actividad realizada por los voluntarios del proyecto de enero a junio, época de desove del animal en Noronha. Consiste en acompañar el monitoreo nocturno de estos guardianes en busca de tortugas desovando en la Praia do Leão, principal punto de desove en la isla.
Además de las tortugas, los delfines también cautivan a los turistas. En el Mirante dos Golfinhos es posible observar a estos encantadores animales, que buscan la playa para descansar. Durante la noche, los delfines permanecen en alta mar, en busca de alimento. Por tanto, el alba es el mejor horario para avistarlos. El ritual cuenta además con la presencia de aves marinas, que brindan un verdadero show.
Asimismo, las playas de agua cristalina de Fernando de Noronha conservan la naturaleza salvaje de la región. Es posible en la zona una zambullida en uno de los mejores puntos del Brasil y del mundo para conocer la fauna y la flora marinas. Entre las opciones que ofrece la isla se destacan la Praia da Conceição, Cacimba do Padre, Boldró, Baía dos Porcos y la Baía do Sancho.
Para una cena a la luz de velas, el archipiélago también cuenta con una red de restaurantes donde se puede saborear desde la culinaria regional más sencilla hasta los platos más refinados, como los frutos del mar. (noronha.pe.gov.br)
Fuente: Caribbean News Digital